En el quinto día del juicio político que se sigue en contra del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, cinco senadores republicanos votaron a favor de llamar a testigos, una noción que fue aprobada por el Senado.
En una decisión que resultó sorpresiva, los senadores votaron 55-45 a favor de escuchar a testigos, destaca la elección de los republicanos Susan Collins, Lisa Murkowski, Mitt Romney, Ben Sasse y Lindsey Graham, quien cambió de opinión de último momento.
Con esta votación, el juicio podría extenderse más de lo esperado, ya que el Senado deberá definir el reglamento para procesar las declaraciones ofrecidas por los testigos.
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El principal fiscal demócrata del impeachment, Jamie Raskin, quiere escuchar la declaración de la representante republicana por Washington Jaime Herrera Beutler, quien presuntamente posee información relevante para el proceso.
Herrera Beutler informó que el líder de la minoría de la Cámara de Representantes, el republicano por California Kevin McCarthy, le dijo que en una llamada con Trump, durante los disturbios del 6 de enero, le pidió ayuda pero fue rechazado.
UNA CONDENA ES POCO PROBABLE
Los abogados defensores del exmandatario se oponen a la convocatoria de testigos, misma que no estaba prevista como parte del proceso.
“Si quieren tener testigos, voy a necesitar al menos 100 deposiciones, no solo una”, señaló Michael Van der Veen, uno de los abogados de Trump.
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Para condenar a Donald Trump por incitar a la violencia en el Capitolio el pasado 6 de enero, los demócratas necesitan el voto de 17 republicanos, aunque dicho escenario parece poco probable.
Mitch McConnell, líder del Partido Republicano en el Senado, le comunicó a sus colegas que votará a favor de la absolución del expresidente, además tiene planeado hablar en el pleno tras el juicio para explicar su voto.
