En un espectáculo gratuito y donde ‘Checo’ Pérez recorrió la Avenida Paseo de la Reforma a bordo de un Red Bull, la afición mexicana se le entregó.
Con las vialidades de esta histórica calle de la capital a reventar, entre la Glorieta de la Diana Cazadora y el Ángel de la independencia, ‘Checo’ Pérez abordó del RB7 (que alguna vez manejó Sebastian Vettel), y dio una exhibición para todos los aficionados mexicanos.
Desde muy temprano los fanáticos se acercaron al lugar para apartar una visibilidad privilegiada y asegurarse el mejor lugar disponible para ver y escuchar a ‘Checo’. Era algo que obligó a los aficionados a madrugar, con todo y que el ‘show’ comenzó alrededor de las 11 de la mañana.
Sin números oficiales, se habla de que 100 mil personas decidieron ir a la exhibición del tapatío. Por horas, se pudieron escuchar los “Oeeeeeee; oeeeeeee; oeeeeeee; ‘Checo’, ‘Checo’”, aunque otro grito que se logró escuchar fue el del nuevo mejor apodo de ‘Checo’ Pérez, el famoso “viejo sabroso” cantado al ritmo de Seven Nation Army.
Checo se entregó a su afición
Sergio Pérez correspondió todas las muestras de cariño montado en el Red Bull y a pie. Dio una caminata para ser ovacionado, vitoreado con todos los que sueñan con un podio este domingo en el Autódromo Hermanos Rodríguez .
Checo, a enfocarse en el Gran Premio
De esta forma, lo que sigue para el piloto azteca es enfocarse en su auto, en la puesta a punto del mismo, en memorizar cada centímetro del asfalto, atender a las conferencias de prensa dentro del Autódromo de los Hermanos Rodríguez, y todo por un sueño: que el verde, blanco y rojo suba al podio de los vencedores en el Gran Premio de la Ciudad de México.