La familia Obama atraviesa por un momento lleno de tristeza, tras la partida de su querido perro, Bo.
Barack Obama, ex presidente de Estados Unidos, dedicó un emotivo mensaje de despedida, en el que agradeció al fallecido can por su amor y lealtad hacia él, su esposa e hijas.
“Este día, nuestra familia perdií a un verdadero amigo y leal compañero. Por más de una década, Bo fue constante y gentil en nuestras vidas, siempre feliz de vernos en nuestros mejores días, los malos y los regulares”, dice un fragmento de la despedida del ex mandatario.
El ex presidente Obama también reconoció que Bo atravesó momentos complicados, pues le costó adaptarse a la Casa Blanca y reconoció que, a pesar de todo, nunca atacó a nadie del personal.
“Le encantaba lanzarse a las albercas en verano, un amor con los niños, alguien que trataba de robar la cena de las mesas y un perro con un gran cabello. Fue exacatamente lo que necesitábamos y más de lo que esperábamos. Vamos a extrañarlo”,concluye el texto compartido por el ex presidente.
Barack Obama compartió dos fotografías de Bo, una en la que el can lo acompaña por los pasillos de lo que aparentemente es la Casa Blanca, y otra en la que el perro está rodeado de niños, siempre sonriente y disfrutando la compañía humana.
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¿De qué raza era Bo?
Bo era de la raza perro de aguas portugués, y llegó a la familia en 2008 como un regalo del entonces senador Ted Kennedy, uno de los grandes defensores de la campaña presidencial de Barack Obama en aquel entonces.
Bo llegó a la familia después de que Obama ganó a la presidencia y era presidente electo. Previamente, el ex senador por Illinois le había prometido a sus hijas, Malia y Sasha, que podrían tener un perro después de las elecciones y el regalo de Kennedy llegó en el momento preciso.
El can, de pelaje negro con manchas blancas en las patas y pecho, llegó a la Casa Blanca junto a la familia Obama en 2009, cuando era apenas un cachorro de seis meses.
Fue entonces que también llegó una especial fascinación por la mascota, a tal grado, que miles de niños estadounidenses enviaron cartas al perro, e incluso protagonizó un cuento infantil: ‘Bo, America’s Commander in Leash’ (Bo, el comandante con correa de Estados Unidos’, en referencia al rango de comandante en jefe de las Fuerzas Armadas estadounidenses que ejerce el presidente. El libro fue escrito por Naren Aryal e ilustrado por Danny Moore.
Ante la casi permanente soledad de Bo, Michelle Obama, esposa del ex presidente, decidió que era necesario que interactuara con más perros, por lo que Sunny, otro perro de aguas portugués, se unió a la familia en 2013.
Los perros son una tradición en la presidencia estadounidense. De los 46 presidentes que ha tenido la unión americana, sólo uno, Donald Trump, no tuvo compañeros caninos.
Actualmente, el presidente Joe Biden tiene dos pastores alemanes: Major y Champ, y recientemente ha manifestado su intención de adoptar un tercero.
También han llegado gatos a la Casa Blanca, como el caso de Socks (calcetines), el gato de pelo blanco y negro de Bill Clinton, o India, la gatita que convivió junto a tres perros durante el mandato de George W. Bush.
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