Datos preliminares del INE indican que el voto de los mexicanos fuera de México tuvo un incremento del 53 por ciento con respecto al 2018. "¡Queremos votar!, ¡queremos votar!”, gritaban mexicanos afuera del Consulado de Los Ángeles. El interés por la participación cívica sorprendió a todos, empezando por el INE, quienes no imaginaron que el número de personas que no estaban registradas para votar se presentaran en los Consulados para tomar ventaja de que habían dispuesto mil 500 boletas por sede para ellos.
Martha García, quien sí se registró llegó a las cinco de la mañana para hacer historia: “Yo en el 2018 voté, pero postal, así que es la primera vez que lo haré presencial. Me siento feliz”. Su queja fue que como fue la primera, tomó un poco de trabajo abrir el bote de la tinta para que en su pulgar quedara huella de su participación.
Guillermina Guevara, quien no ha regresado a México desde hace 33 años que llegó a vivir a Los Ángeles, votó por primera vez. Su motivación de participar es que habían dos mujeres en la boleta y que el voto podía ser en persona. Aunque se topó con la sorpresa: a diferencia de México, en los Consulados el voto fue electrónico. “Tuve buena experiencia, me explicaron todo, fue fácil”, dijo.
Las líneas que daban la vuelta a la manzana en varias sedes consulares, me hizo recordar cuando hace 25 años que llegué a Los Ángeles, había que acampar de madrugada para obtener los primeros números que garantizaran la entrada para poder realizar un trámite. Muchos mexicanos que se registraron y que, a pesar de permanecer horas en la línea, no pudieron votar por la lentitud en que avanzaba la fila, recordaban el sistema y les hubiera gustado que hubiera más orden. “Están muy mal organizados se hacen aglomeraciones, ni siquiera tienen seguridad hubieran contratado policía”, comentaron.
Malestar provocó provocaciones
De las mil 362 personas que estaban registradas para votar de manera presencial en Los Ángeles, tan solo 840 pudieron hacerlo. A pesar de ser el Consulado que tenía más personas registradas, fue el que menos votos sufragó.
“Está muy limitado, por ejemplo, nueve urnas para un Consulado tan grande como Los Ángeles es muy poquito. Necesitamos multiplicarlo por lo menos 10 veces para agilizar, para que la gente participe en mayores números”, me comentó Raúl Murillo, de Hermandad Mexicana, y quien fungió como observador por parte del PAN. “A pesar de que nos dio el voto presencial, hay muchas personas que no entienden la tecnología y eso ha detenido mucho el proceso”, indicó.
Conforme pasaron las horas, el malestar de algunos mexicanos que llevaban horas esperando ser de los afortunados comenzó a subir de tono. Parte del enojo fue contra los medios de comunicación que estábamos ahí, culpando de falta de información. “Si el voto adentro es electrónico, porque no nos dan oportunidad de hacerlo hoy aunque no estemos registrados”, gritaba uno. También lanzaba consignas como “Morena”, “Fuera el INE” y “Chayoteros”.
“Como cualquier fiesta uno se tiene que registrar”, indicó Leobardo Mendoza, enlace del INE en Los Ángeles al cuestionarlo sobre el enojo de muchos mexicanos que sintieron que México y el Instituto Nacional Electoral les falló al no considerar la participación ciudadana.
De acuerdo con datos históricos, el voto de los mexicanos en el exterior ha aumentado con cada elección:
- 2006 - 42 mil 876
- 2012 - 59 mil 115
- 2018- 98 mil 854
- 2024- 186 mil 372
Aunque una gran mayoría escogió la manera electrónica para sufragar su voto, el presencial abre una puerta de confianza: “Yo vine porque así estoy segura que mi voto sí cuenta”, comentaron varias personas en línea. Para una gran mayoría que se fue sin que su voto contará, la experiencia valió la pena, y esperan que se tomen en cuenta todas sus quejas para que en las próximas elecciones no menosprecien el voto de los mexicanos en el exterior, que cada año sigue creciendo. “A los mexicanos aquí sí nos interesa lo que pasa allá y creo hoy lo demostramos”, decían muchos.
