El fallecido sacerdote de Montenegro, Serbia, Amfilohije Radovi, fue despedido con besos y abrazos de sus seguidores, a pesar que el clérigo de la iglesia ortodoxa murió a causa de Covid-19.
Las imágenes de las exequias del sacerdote de 82 años causaron indignación entre usuarios de las redes sociales, pues en algunas se observa que los miles de seguidores se acercan a Radovi sin protección, como el cubrebocas, para despedirse de él.
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Por si fuera poco, el cuerpo de Radovi permaneció expuesto desde el pasado 3 de noviembre en la iglesia de Podgorica, donde será enterrado en una cripta.
Radovic era un obispo, pero ferviente nacionalista que ejercía una gran influencia política, fue diagnosticado con el coronavirus el 6 de octubre y hospitalizado en Podgorica desde entonces. El clérigo murió el 30 de octubre y, un día después, su féretro fue abierto a sus seguidores.
Después del estallido de la pandemia por el nuevo coronavirus, el sacerdote Amfilohije aparecía regularmente en público sin cubrebocas.
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Aunque durante la velación de su cuerpo se entregaban tapabocas, los creyentes se las quitaban y no parecían seguir las medidas de sana distancia.
De acuerdo con medios locales, la ciudad de Montenegro ha reportado 290 muertes y 17 mil 746 infecciones por la enfermedad respiratoria.
La Iglesia Ortodoxa Serbia tiene alrededor de 12 millones de seguidores, principalmente en Serbia, Montenegro y Bosnia, todas exrepúblicas yugoslavas limítrofes.
Koronavirüsten ölen Karadağ Sırp Ortodoks Kilisesi Başpikoposu Amfilohije Radoviç'i cenazesinde öptüler pic.twitter.com/2kCgekAL9o
— Selâmi Haktan (@slmhktn) October 31, 2020
