El pasado sábado 25 de julio, después de las fuertes lluvias, dos menores de tan sólo 11 y 14 años fueron arrastrados por el arroyo Topo Chico en Monterrey, Nuevo León, debido a la llegada del huracán “Hanna”.
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Fue por la tarde cuando ocurrió el accidente, cerca de la comunidad Rafael Buelna. Dos jóvenes jugaban cerca de la orilla del arroyo cuando fueron arrastrados por la fuerte corriente que se provocó a causa del paso de dicho desastre natural en el noroeste de México.
Según los informes de los medios locales, el personal de la organización de Protección Civil de Nuevo León llegó al lugar en el que inmediatamente iniciaron la búsqueda de ambos niños que cayeron a las aguas del riachuelo.
Por otra parte, han comenzado a hacer guardias y operaciones en los municipios de San Nicolás, Apodaca y Pesquería, lugares por los que cruza el arroyo y donde posiblemente podrían ser llevados.
Hasta ahora, las autoridades no han podido encontrar a estos jóvenes y continúan realizando búsquedas cerca de Topo Chico.
Protección Civil de Nuevo León advirtió a la gente sobre los fuertes vientos causados por el huracán “Hanna” y se recomienda cerrar y asegurar puertas, ventanas y toldos; quitar objetos que puedan caerse y causar accidentes; pegar cinta adhesiva en el interior del vidrio de la ventana para evitar que se rompa y cause daños; disminuir la velocidad mientras se conduce y prestar atención a las posibles caídas de árboles y fuentes de energía.
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Este nuevo huracán ha provocado en las últimas horas, fuertes lluvias y vientos en el noroeste de México y en el sur de Texas y aún se esperan graves inundaciones. Según el Centro Nacional de Huracanes (NHC por sus siglas en inglés) este sábado llegó a la Isla del Padre en la costa de Texas.
