Cd. de México.- De 928 millones de vacunas contra COVID-19 aplicadas en el mundo, solo el 8.6 % han sido destinadas a América Latina, y principalmente a cuatro países. Fue la reflexión del Canciller Marcelo Ebrard al participar en representación del Presidente de México, durante la XXVII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno.
Ebrard Casaubón señaló que el mecanismo multilateral COVAX creado por la ONU para garantizar el acceso de todos los países a las vacunas, ha tenido limitaciones trágicas pues difícilmente rebasa el 10 por ciento del total de las dosis que se han distribuido en el mundo. Por ello consideró de vital importancia seguir avanzando en los esfuerzos en la región de América Latina para desarrollar vacunas propias e invitó a los países de Iberoamérica a sumarse a estos esfuerzos:
Llama a estados iberoamericanos a cooperar más entre ellos.
“Me permito, y así me lo pidieron los compañeros de la comunidad, invitar tanto a España como a Portugal, Andorra, a los miembros de la Comunidad Iberoamericana, a sumarse a este esfuerzo, a participar, a que hagamos causa común porque, en esencia, decía yo, ya vimos cuáles son los límites de las organizaciones multilaterales. Dicho en otras palabras: nunca más permitir que ocurra algo como lo que hemos vivido ahora, en el futuro inmediato”, dijo el canciller mexicano.
El Secretario de Relaciones Exteriores recapituló sobre los trabajos realizados en América Latina en donde se creó una red de virólogos y la región ya tiene avances en el desarrollo de antígenos: se tienen en fase III, dos vacunas desarrolladas por Cuba, una se denomina Soberana, otra se llama Abdala, y hay otra, de ese país también, en fase II, se denomina Soberana Plus; de Brasil, en fase I ya está ButanVac; de México, Patria está en fase I; de Argentina por entrar a fase I está el proyecto de vacuna de la Universidad de San Martín; y de Chile, también cerca de entrar a su fase I, el proyecto de la Universidad Católica de ese país.
