Una de las misiones históricas de la NASA se dio gracias a que la sonda estadounidense Osiris-Rex logró aterrizar en el asteroide Bennu, donde recogió muestras para devolver a la Tierra en 2023. Es la primera vez que la NASA logra que una sonda toque tierra en un asteroide.
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La sonda Osiris-Rex fue lanzada en septiembre de 2016 en Cabo Cañaveral y, luego de cuatro años, pudo aterrizar en Bennu, que se localiza a más de 320 millones de kilómetros de la Tierra.
De acuerdo con los informes de la NASA, la sonda llegó al asteroide el 3 de diciembre de 2018 y empezó a orbitar a su alrededor el 31 de ese mismo mes.
¿CÓMO FUE EL ATERRIZAJE?
Osiris-Rex arrojó nitrógeno comprimido sobre la superficie de Bennu para levantar polvo y grava, para que la sonda lo recogiera.
“Esta ha sido una hazaña increíble”, afirmó el comunicado de la NASA.
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— NASA's OSIRIS-REx (@OSIRISREx) October 21, 2020
“Un pedazo de roca primordial ha sido testigo de toda la historia de nuestro sistema solar y puede estar ahora listo para volver a casa, con generaciones de descubrimientos científicos, y estamos ansiosos por ver qué viene después”, menciona el mensaje de la NASA.
El aterrizaje de Osiris-Rex está previsto para el 24 de septiembre de 2023 en el desierto de Utah.
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La NASA toma una muestra de un asteroide en una operación histórica ☄️🚀 pic.twitter.com/71q6MH43We
— Reuters Latam (@ReutersLatam) October 21, 2020
