Nueva Zelanda declaró libre de Covid-19 al último paciente contagiado a través de un brote local, luego de que otros 37 casos catalogados como importados siguen activos en el país.
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El rebrote que presentó Nueva Zelanda se registró el 11 de agosto en Auckland, cuando cuatro integrantes de una familia presentaron síntomas.
Este rebrote provocó 179 casos, los que se sumaron a otros siete contagios locales vinculados a un grupo de personas que retornó del exterior.
“Es un gran hito. Los neozelandeses han logrado una vez más, a través de sus acciones, aplastar al virus. Los sistemas que hemos desarrollado y reforzado desde la primera ola de Covid-19 han sido efectivos para seguir al virus, aislarlo y eliminarlo”, mencionó el ministro de Salud, Chris Hipkins.
Este 8 de octubre la ciudad de Auckland regresó a la normalidad, luego de un segundo confinamiento y tras declarar que ya no hay casos locales, lo que significa que las personas se pueden reunir sin límite de aforo ni normas de distancia.
Desde que comenzó la pandemia, Nueva Zelanda registra un total de mil 505 casos y 25 fallecimientos. Este país declaró el primer confinamiento el 25 de marzo, cuando solo había 50 casos; luego regresaron a la nueva normalidad el 8 de junio.
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