El petróleo profundizaba el viernes su descenso por debajo de los 74 dólares el barril, pero se encaminaba a cerrar la semana con pocos cambios tras una inesperada recuperación desde el desplome del lunes, respaldado por expectativas de que el suministro siga ajustado mientras la demanda se recupera.
El precio del crudo y de otros activos de riesgo se desplomaron al comienzo de la semana por preocupaciones sobre el impacto sobre la economía y la demanda petrolera del aumento de casos de la variante Delta del COVID-19 en Estados Unidos, Reino Unido, Japón y otras partes.
El Brent cedía 23 centavos, o un 0,31%, a 73.58 dólares el barril, tras ganar un 2.2% en la víspera.
El West Texas Intermediate en Estados Unidos (WTI) bajaba 16 centavos, o un 0.22%, después de avanzar un 2.3% el jueves.
"…Claramente, los alcistas del petróleo han vuelto…", dijo Stephen, de la correduría PVM. "…Pero eso no significa que las preocupaciones por el virus se hayan disipado por completo…".
Se han recuperado por optimismo de que la demanda siga fuerte
El Brent se encaminaba a cerrar la semana con un alza marginal del 0.2%, tras acumular pérdidas en las tres semanas previas.
El WTI se disponía a concluir la semana estable.
"…El regreso del crudo me sorprendió…", dijo Jeffrey Halley, de la correduría OANDA.
Ambos contratos cayeron cerca de un 7% el lunes, pero han recuperado ya ese declive en medio de esperanzas de los inversores de que la demanda siga fuerte y que el mercado reciba respaldo del descenso de las existencias petroleras y el aumento de las tasas de vacunación.
