Cd. de México.- Minutos después de las 2 de la tarde comenzaron a llegar a Palacio Nacional gobernadores de todo el país; estaban convocados a una comida, la primera del año, con el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
En esta reunión de acercamiento donde no hubo una agenda específica, el Primer Mandatario ofreció un menú de platillos típicos de Tabasco: croqueta de pejelagarto, tamal de chipilín, cordero, agua de matali y chocolate amargo.
Luego de aproximadamente hora y media, los mandatarios estatales salieron del encuentro con buen ánimo, compartieron que se trató de una reunión cordial en la que el Presidente los invitó a tender puentes y cerrar filas a favor del país. Y prometió que en febrero dialogará con gobernadores emanados de la oposición.
Por lo pronto, los mandatarios estatales coincidieron en que continúan en el tintero temas como el INSABI; incluso los panistas adelantaron que presentarán su propia propuesta en materia de salud, la próxima semana.
“Realmente no vemos esa necesidad de adherirnos a un convenio, porque en el estado funciona el sistema de salud, hay muchas áreas qué mejorar sin lugar a dudas, pero funciona. Lo que vamos a hacer es una propuesta los gobernadores de acción nacional de cómo se puede garantizar esa universalidad del servicio y esa gratuidad a través del recurso que pueda aportar la federación y los estados”, comentó Diego Sinhué Rodríguez, gobernador de Guanajuato.
Otros gobernadores consideraron que el Sistema de Salud para el Bienestar debe ser analizado para encontrar el mejor esquema de beneficio a la población.
“Yo estoy analizándolo, lo más probable es que sí, el tema es trabajar todos en equipo y sacar adelante el tema de salud que es tan importante para nuestro país”, aseveró Claudia Pavlovich, gobernadora de Sonora.
“Puede haber diferencias, pero los gobernadores todos, de todos los colores queremos ayudar al presidente a sacar adelante al país, ojalá en el tema particularmente de salud se pueda encontrar un acuerdo que sirva a México“, dijo Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco.
Luego de la entrevista con medios, en la calle de Corregidora, el gobernador de Guanajuato respondió a la oferta de un vendedor de chicles: Compró algunos para los representantes de los medios, aunque muy pocos aceptaron. Al final, el vendedor cerró el trato muy contento, pues el mandatario le pagó 5 chicles con 100 pesos.
