El bienestar de tu perrito comienza con su alimentación, pero no todo lo que parece apetitoso para ellos es seguro. Conocer los alimentos que afectan la salud de tu perro es clave para evitar problemas como diarrea, malestar digestivo o complicaciones más graves.
Te puede interesar: ¿Qué tanto afecta el estrés humano en los perros? Esto revela la ciencia
¿Cuáles son los principales alimentos que afectan la salud de tu perro?
- Grasas y alimentos fritos: Tocino, embutidos o pollo con piel se encuentran entre los alimentos que afectan la salud de tu perro, ya que pueden provocar diarrea y enfermedades graves como pancreatitis. Los perros no están diseñados para procesar grandes cantidades de grasa.
- Dulces y chocolate: Contienen xilitol y azúcar, sustancias que dañan el metabolismo canino y representan un peligro para su vida.
- Lácteos: Son alimentos que afectan la salud de tu perro porque muchos de ellos carecen de la enzima lactasa necesaria para digerir la lactosa, causando gases, diarrea e hinchazón.
- Frutas y verduras peligrosas: Uvas, cebolla y ajo son tóxicos, mientras que alimentos como el mango o la piña deben ofrecerse con moderación.
- Alimentos picantes y condimentados: Forman parte del listado de los alimentos que afectan la salud de tu perro porque irritan el sistema digestivo, causando inflamación y deshidratación.
- Carne cruda y huesos: Aunque algunos perros pueden consumir carne cruda, requiere manejo cuidadoso. Los huesos, por su parte, pueden astillarse, causando obstrucciones o heridas internas.
Los alimentos que fortalecen la salud de tu perro
Como puedes imaginar, una dieta balanceada es clave en el fortalecimiento de la salud de tu perro. En este sentido, alimentos como el pollo cocido sin grasa, el salmón (fuente de ácidos grasos omega-3) y el arroz integral son excelentes opciones para mantener su energía y salud digestiva. Las zanahorias, manzanas sin semillas y calabazas son ideales como snacks saludables, ya que aportan vitaminas y antioxidantes que refuerzan su sistema inmunológico.
De igual forma, los huevos cocidos y pequeñas porciones de yogur natural (sin azúcares ni lactosa) pueden beneficiar su pelaje y salud intestinal. Pero ojo: consulta siempre al veterinario para garantizar que la dieta de tu perro sea adecuada y completa.
Te puede interesar: Estos son los ajustes para cuidar la salud de tu perro en el invierno: ¡Toma nota!
