Las Panteras de Carolina han llegado a un acuerdo de extensión de contrato por dos años y 29.5 millones de dólares, con más de 20 garantizados, de acuerdo a la última información de la NFL, para amarrar a uno de los receptores más sorpresivos de la liga, Robby Anderson.
La sorpresiva carrera de Anderson
La relación, en consecuencia, se extiende hasta la temporada 2023, ampliando la carrera de un jugador que no parecía tener mucho futuro en la liga, pues ni siquiera fue seleccionado en el draft, proveniente de la Universidad de Temple en el curso 2016. Sin embargo, con los Jets de Nueva York se fue haciendo de un lugar en el emparrillado tras lograr 42 recepciones en ocho partidos en su año de novato.
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A partir de ahí acaparó los reflectores de varios equipos de la NFL y las Panteras de Carolina lo contrataron para la temporada pasada con un acuerdo que se elevó hasta los 20 millones, 10 de ellos garantizados. En ese periodo registró récords personales en aperturas (16), recepciones (95) y yardas (1,096).
El creciente protagonismo de Robby Anderson
Robby Anderson fue el objetivo principal de los quarterbacks que jugaron con los Panthers a lo largo de la temporada pasada y todo parece perfilarse para que vuelva a ocurrir, este año de la mano de Sam Darnold.
A pesar de ello, Carolina utilizó su selección de segunda ronda del pasado draft en Terrace Marshall Jr., un talentoso receptor, pero en todo caso serviría de apoyo para Anderson y la ofensiva, no para quitarle protagonismo.
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Robby Anderson ya vio acción en la pretemporada de la NFL, y su primera atrapada fue para 16 yardas ante los Baltimore Ravens, la semana pasada. Se espera que vuelva a ver acción el próximo viernes, cuando Carolina enfrente a los Pittsburgh Steelers en lo que será su último duelo previo a la temporada que arranca el 9 de septiembre.
