¿La caída del cabello por Covid-19 es otro de los síntomas? Expertos aclaran que sí, pero es temporal. Estas son las razones.
Médicos e investigadores han documentado que varios pacientes con el virus de SARS-CoV-2 no solo han presentado fiebre, tos seca o cansancio, sino también la caída del cabello, ya sea mientras están contagiados o al superarlo.
De acuerdo con la red sanitaria internacional Grupo Hospiten, esto no debe ser motivo de angustia, ya que se trata de una patología llamada efluvio telógeno agudo y que suele durar entre tres y seis meses.
La dermatóloga Lucía Pimentel explica que “relación entre el coronavirus y la pérdida de cabello se fundamenta en el estrés emocional y físico que supone la enfermedad, por ello se produce esta patología dermatológica en la que se altera el ciclo del crecimiento del pelo durante un periodo de tiempo limitado y de carácter reversible”.
Verdad o mito
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Estudios revelan que dicha patología se presenta “en situaciones de estrés como el postparto o tras infecciones que suponen un gran estrés físico y emocional para los pacientes”, agrega. Por lo anterior, el confinamiento social podría ser uno de los causantes.
Pimentel recomienda no dejar a un lado los hábitos de higiene y cepillado habituales. “No hacerlo no previene la caída de más cabello, sino todo lo contrario, ya que se ayuda a desprender el pelo que está a punto de caer y a que el nuevo crezca antes”.
Asimismo, es ideal que el paciente tenga una dieta saludable rica en frutas y verduras y no agregar suplementos o vitaminas no recomendadas por un especialista.
Si la angustia es constante, pide acudir con un especialista para seguir un tratamiento como el minoxidil, nutricosméticos o plasma rico en plaquetas, para acelerar el proceso de crecimiento de nuevo cabello.
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