Abuso infantil y protección digital: desafíos que enfrentan los niños en la actualidad

La desprotección de los niños es una preocupación creciente, especialmente cuando se encuentran en espacios que deberían ser seguros, como el hogar o la escuela. En este contexto, organizaciones y especialistas alzan la voz para defender a la infancia, como es el caso de Dafna Viniegra, experta en sanación emocional y autora del libro “Sanar para crecer y trascender”. Su participación en diversos foros busca visibilizar y combatir el abuso infantil, un problema cuyas estadísticas son desoladoras.

El abuso sexual infantil se extiende impunemente en el ámbito familiar, social y gubernamental, lo que subraya la necesidad imperante de implementar políticas públicas eficaces para abordar no solo este flagelo, sino también otras formas de maltrato físico y virtual.

Las cifras son aterradoras: se estima que cada minuto y medio, o incluso cada dos o tres minutos, al menos 10 niños son víctimas de abuso. Esta estadística es aún más impactante si se considera la enorme cantidad de casos que no son denunciados.

Lo más doloroso es que el 85% de los abusos ocurren dentro del propio hogar, perpetrados por personas de confianza para los niños, como tíos, abuelos o amigos. Esta cercanía facilita la agresión y, lo que es aún más alarmante en la actualidad, el riesgo se ha trasladado al entorno digital.

A pesar de que los niños estén físicamente seguros en sus habitaciones, la interacción en línea los expone a peligros inimaginables. Casos como el de un niño fotografiado inapropiadamente en un baño evidencian la creciente audacia de los agresores en el mundo virtual.

La sociedad parece vivir en un estado de desatención hacia la infancia. Los adultos, a menudo absortos en sus propios problemas o traumas, no están cumpliendo su rol protector, mientras que otros aprovechan la inocencia de los niños para explotarlos. Es crucial crear conciencia sobre estos temas y fomentar una responsabilidad colectiva en la defensa de los derechos de los niños.

La amenaza digital es particularmente preocupante. En tan solo 14 minutos, un menor puede ser persuadido para realizar actos inapropiados, como quitarse la ropa o enviar fotografías. Trágicamente, el 60% del material de abuso sexual infantil que circula en línea es “autogenerado”, es decir, son los propios niños quienes, manipulados, se toman y envían estas imágenes.

Este fenómeno es resultado de la creciente cantidad de tiempo que los niños pasan frente a pantallas, a menudo sin supervisión adecuada. Los padres cometen el error de creer que sus hijos están seguros con un dispositivo en mano, ignorando los peligros del grooming (adultos que se hacen pasar por niños para ganarse su confianza) y el ciberacoso.

La prevención debe ser la prioridad. Ya no basta con la vigilancia tradicional; es esencial supervisar el uso de dispositivos electrónicos, ya que el abuso digital tiene efectos devastadores en el sistema nervioso de los niños, provocando problemas de salud mental a corto, mediano y largo plazo. Dado que gran parte de la vida actual se desarrolla en el ámbito digital, la protección infantil también debe adaptarse a este entorno.

Para ello, existe la plataforma Te Protejo México, una herramienta fundamental para la prevención y denuncia. Esta página permite denunciar de forma anónima, o con seguimiento si se prefiere, casos de sextorsión, grooming y ciberacoso. Además, ayuda a eliminar material sensible como “nudes” o “packs” que vulneran la intimidad de los menores. Te Protejo México colabora con Interpol y es una plataforma de alcance mundial.

¿Cómo puedo denunciar?

La denuncia puede ser realizada por adolescentes que deseen ayudar a sus amigos, o por adultos que descubran material inapropiado en los dispositivos de sus hijos, incluso sin que estos se enteren.

La plataforma también permite denunciar el material mal llamado “pornografía infantil” (ya que no existe consentimiento en estos casos), refiriéndose correctamente a este contenido como “abuso sexual infantil”. Es vital que cualquier persona que se encuentre con este tipo de material lo denuncie, contribuyendo así a desarticular estas redes de explotación.

¿Consideras que es necesario implementar programas educativos para padres y tutores sobre los riesgos digitales que enfrentan los niños? Déjanos tu comentario en redes sociales.