25 de octubre.- Luego de varias jornadas violentas en las que miles de chilenos protestaron contra el gobierno de Piñera y de la conservadora Constitución vigente, hoy, por fin, los ciudadanos podrán dar marcha atrás a su Carta Magna.
Más de 14.8 millones de personas, entre chilenos y unos 380 mil extranjeros residentes, han sido convocados para votar si quieren una nueva Constitución y cómo se redactará; la actual Carta Magna heredada de la dictadura de Augusto Pinochet.
“Apruebo” o “Rechazo” es la primera pregunta que tienen que responder los millones de electores convocados a participar en un país donde el voto es voluntario desde 2012.
El presidente Sebastián Piñera llegó temprano a sufragar y llamó a los ciudadanos a ejercer su derecho a respaldar la opción de su preferencia, destacando que la mayoría de los chilenos quiere perfeccionar la Constitución.
Tras posponerse en abril debido a la propagación del COVID-19, las autoridades decidieron llevar adelante el plebiscito bajo estrictos protocolos sanitarios.
