Hasta ahora, Angela Merkel, canciller de Alemania, ha sostenido reuniones con obreros, cuidadores, personas dependientes de terceros y policías a través de la plataforma Zoom, iniciando cada conversación con una pregunta: "¿qué me quiere contar?”
La intensión de Merkel con estas llamadas es sencilla: mostrar empatía a los pobladores, pero también conocer su estado de ánimo de forma directa, sin ningún tipo de intermediario.
Las reuniones llevan por nombre Conversación con la Canciller y tienen hora y media de duración al más puro estilo de Merkel: no hay música de fondo, videos explicativos o gráficos, todo es una conversación directa entre la jefa de gobierno y la ciudadanía.
Este tipo de foros no son nuevos bajo el mandato de Merkel, pues antes de la pandemia de Covid-19, la canciller acostumbraba reunirse una o dos meses al año con alemanes de todas las regiones del país y de diferentes ocupaciones para escuchar sus puntos de vista sobre temas trascendentales para la sociedad, la única diferencia es que ahora las reuniones son virtuales.
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La plática más reciente de la canciller fue con policías, a quienes les pidió que respeten el derecho a la libre expresión de los escépticos que no creen en la pandemia, pues, aunque pueda parecer erróneo, es una base fundamental de la democracia para ella.
Los cuatro grupos que hasta ahora se han reunido virtualmente con Merkel fueron seleccionados por la cancillería, mientras que los 15 participantes de cada grupo fueron elegidos por grupos especializados y la Cámara del Comercio.
Angela Merkel tiene contemplado reunirse virtualmente con estudiantes la próxima semana y así escuchar puntos de vista de las nuevas generaciones.
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