Cada 28 de diciembre conmemoramos el Día de los Santos Inocentes con bromas, chistes y hasta chismes, pero, ¿sabes cuál es el origen de esta festividad?
La conmemoración tiene raíces en la tradición católica, precisamente en la matanza de niños recién nacidos ordenada por Herodes I en Belén (Judea).
Según el relato, el gobernante dio esa orden con la intención de eliminar a la amenaza que representaba Jesús de Nazaret cuando llegara a convertirse en adulto, pues antes del nacimiento del niño, tres magos del oriente (conocidos actualmente como los Reyes Magos), pasaron por el palacio de Herodes, quienes revelaron parte de lo que el futuro le auguraba al recién nacido.
Aunque en la Biblia se habla muy poco de la Matanza de Belén, también se menciona en otras escrituras como el Evangelio Armenio, considerado por la iglesia católica como un relato apócrifo. Según datos obtenidos de este documento y considerando las dimenciones del pueblo de Belén, se estima que fueron asesinados unos 20 niños menores de 2 años de edad.
Con la llegada de la religión católica a Latinoamérica, se hereda también parte de la costumbre española de realizar bromas en esta fecha, principalmente en la zona de Cetroamérica y México.
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Es característico de este día jugar bromas a las personas ‘inocentes’, y aunque a veces se hacen chistes simples, también hay quienes llegan a hacer bromas pesadas, aunque sea cual sea el caso, siempre se termina la broma con la frase ‘inocente palomita que te dejaste engañar’, en referencia a los niños inocentes que fueron asesinados en la época de Herodes.
Esta fecha también es conmemorada por iglesias católicas, presentando la figura del ‘Niño Dios’ vestido y homenajeado con ofrendas de dulces y comida.
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