Como un huracán pasó por encima del australiano, que nunca había alcanzado los cuartos de final de un Masters 1000 de Paris para vencerlo por parciales de 6-1 y 7-6(3) en una hora y 3 minutos.
La victoria 1,001 fue más placentera que la anterior contra Feliciano López, el ibérico demostró que su adaptación a la pista rápida bajo techo es una realidad. Rafael Nadal forzó el juego de desempate y el australiano perdió el hilo de un partido en el que había conseguido contrarrestar las armas del número dos del mundo, que se apuntó la victoria.
El ‘rey de la tierra batida’ buscará clasificarse a semifinales en este torneo por cuarta vez en su carrera. Su rival será su compatriota Pablo Carreño, a quien ha ganado los seis duelos que han disputado, sin que Carreño Busta haya conseguido arrebatarle un set.
Será el tercer duelo entre ambos esta temporada, en la que Nadal se impuso en el Abierto de Australia y en la misma ronda del Masters 1.000 de Roma. Carreño llegó a aquel partido tras haber disputado las semifinales del Abierto de Estados Unidos, sin tiempo de adaptación a la superficie y al horario.
El ganador de 20 Grand Slams destacó que supo “sufrir cuando había que sufrir y rematar cuando se pudo”, también destacó que salvo el punto de set que levantó en el segundo con un 5-6 en el marcador, reconoció que no sintió peligro en ningún momento.
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