Athos y Tango, los perritos rescatistas que fueron envenenados con salchichas, recibieron un homenaje en la sede nacional de la Cruz Roja, en la Ciudad de México. Los ejemplares fueron envenenados el pasado 14 de junio en Querétaro.
Los integrantes de la Cruz Roja brindaron un minuto de aplausos a Athos y Tango para reconocerles su labor, ya que durante sus casi cinco años de edad ayudaron a rescatar a varias personas en diferentes eventos catastróficos, como los sismos en septiembre de 2017.
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A través de sus redes sociales, la Cruz Roja compartió una serie de fotografías del homenaje que realizaron a Athos y Tango, donde aparecen integrantes de la institución junto a un recuadro de cada perrito.
Los dos perros fueron envenenados con salchichas en Querétaro en casa de su entrenador y dueño, el rescatista Edgar Martínez. El equipo USAR (Búsqueda y Rescate Urbano, por sus siglas en inglés) lamentó la pérdida de este miembro de su fuerza.
“Siempre estarán en nuestro corazón, sus huellas quedarán plasmadas en nuestra memoria. Hoy dedicamos una ceremonia de agradecimiento y despedida de los caninos Athos y Thango”, escribió la sede nacional de la Cruz Roja en su cuenta de Facebook tras el homenaje.
Perritos siguen los pasos de Athos y Tango
A través de las redes sociales, la Cruz Roja informó que tres perritos seguirán los pasos de Athos y Tango porque serán entrenados en la búsqueda y rescate de personas en estructuras colapsadas, labores que realizaron los perros rescatistas después del sismo del 19 de septiembre de 2017.
Los tres cachorros son de la raza Border Collie y fueron entregados por un criadero en Querétaro.
La noticia de que Athos y Tango había muerto se dio a concer el pasado 14 de junio. Los dos perros fueron envenenados con salchichas en Querétaro, en la casa de su entrenador y dueño, Edgar Martínez, quien es rescatista.
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