Zoé Robledo, director general del Instituto Mexciano del Seguro Social (IMSS), detalló la creación de un grupo de expertos para tratar el desabasto de propofol y midazolam, sedantes usados para intubar a los pacientes con Covid-19.
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Todo ésto por el desabasto mundial que se avecina a partir de enero de 2021; Robledo asegura que buscan alternativas.
“Hay un planteamiento de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre un medicamento de sedación que en enero, febrero y marzo va a entrar en una situación delicada en el mundo porque todos estamos comprando los mismos medicamentos”, comentó.
Los expertos están estudiando los esquemas alternos que puedan sustituir temporalmente al Propofol y al Midazolam, así que se proponen los analgésicos como: Buprenorfina, Tramadol, morfina, fentanilo, dexmedetomidina, etomidato, ketamina y tiopental, y los de bloqueo neuromuscular, entre otros.
Recordó que debido a la ley de oferta y demanda en el mercado, están subiendo los precios, pues las farmacéuticas ignoran la situación sanitaria de la pandemia.
Manifestó que este aumento no es lo correcto, así que “entramos en una negociación con ellos para adquirir lo que contratamos el año pasado con el precio establecido en el contrato original, por lo menos en la mitad del requerimiento que hicimos”, precisó Robledo.
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“Existen estados que han comprado esos sedantes a los nuevos precios impuestos por la industria y nosotros creemos que debemos alcanzar acuerdos, en ese sentido, para que no se ponga en riesgo la vida de las personas y se encuentran en situación crítica”, dijo el director del IMSS.
