Keith Raniere de 60 años y líder de la secta NXIVM, fue sentenciado a 120 años de prisión por los cargos de lavado de dinero, asociación para delinquir, robo de identidad, extorsión, trabajo forzoso, y tráfico sexual; sus víctimas detallaron lo vivido de acuerdo a información de Voz de América.
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Camila era una de las 15 víctimas programadas para testificar contra Raniere este martes, como parte de un intento de los fiscales federales de asegurar una cadena perpetua para el acusado.
Las víctimas describieron la imagen de un gurú carismático de autoayuda que lograba atraer a sus seguidores con promesas de que los ayudaría a poder tomar el control de sus vidas, pero una vez estando dentro muchas de las mujeres fueron adoctrinadas por Keith, presionándolas a mantener relaciones sexuales con él, incluso les llegó a marcar sus iniciales en la piel con un cauterizador.
Me jodió la mente durante tanto tiempo
Dijo Camila, la primera de varias víctimas; tenía solamente 15 años cuando Raniere la violó. La mujer aseguró que su relación sexual con el líder de la secta NXIVM duró alrededor de 12 años.
Añadió que el líder de la secta, que entonces tenía unos 40 años, la manipuló psicológicamente, hasta el punto en que se aisló de sus amigos y familiares para que pudiera ser suya.
Le contó al tribunal que decidió hablar como una forma de recuperar su voz y “aceptar el trauma y el abuso”.
India Oxenberg, exmiembro de NXIVM, dijo a la corte que Raniere era un depredador sexual que la obligó a perder tanto peso que dejó de menstruar; lamentó que tenga que pasar el resto de su vida con las iniciales de Keith Raniere grabadas en ella.
Los abogados defensores argumentaron que Raniere es inocente y culparon de su condena a una “campaña mediática” que condujo a un juicio injusto.
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Sus abogados habían pedido al juez federal del distrito, Nicholas Garaufis, una sentencia máxima de 15 años de prisión.
