A Cada Quien Su Santo | Caudal de amor

Rebeca y Sabino están en pleito desde hace tiempo, pues ella asegura que él está contaminando el agua de sus tierras para que eso afecte en sus cosechas. Lo que ninguno de los dos sabe, es que sus hijos tienen una relación amorosa a escondidas. Rebeca le prohíbe a su hija Marisol que no les hable a los hijos de Sabino. Mientras que él se entera que su hijo sale con Marisol y también se molesta. Los pleitos incrementan entre familias, pero no se imaginaban que quien estaba detrás de todo era Donato, el presidente municipal que hacía todo para poder quedarse con las tierras de Donato y Rebeca. Con ayuda de San Juan Nepomuceno, logran aliarse y algo que nunca imaginaron, terminan enamorados, pues resulta ser que tenían una historia amorosa de jóvenes.