Ciudad de México. “Tengo un problema antes del Mundial: el Ramadán. Mis jugadores ayunan desde que sale el sol y hasta que se pone. ¿Y yo cuándo entreno? ¿A las 5 de la mañana? No puedo hacer entrenar a alguien que no bebe líquido ni tiene calorías en el cuerpo”, dijo Héctor Cúper, entrenador de la Selección de Egipto, quien se mostró preocupado por esta práctica del Islam de cara a Rusia 2018.
Estas mismas preocupaciones llegaron al Liverpool FC, pues para la final de la UEFA Champions League del próximo 26 de mayo ante el Real Madrid, sus figuras podrían llegar disminuidos físicamente.
Emre Can, Sadio Mané y Mohamend Salah, estrellas del equipo Red, profesan el Islam y llevan a cabo dicha práctica, la cual consiste en que, en un lapso de 30 días, los musulmanes hacen ayudo durante el día, desde que sale el sol hasta la puesta, y cambia dependiendo del mes lunar.
En este 2018 iniciará la tarde del martes 15 de mayo y hasta el jueves 14 de junio, todo ello de acuerdo a sus creencias y religiones. Esa situación ha hecho que Jurgen Klopp y compañía estén preocupados por la situación nutricional en la que llegarán sus jugadores.
Afortunadamente, hay una opción de posponer el ayuno y retomarlo posteriormente: “Hay jugadores musulmanes a los que les es muy duro jugar durante el mes del Ramadán. Pueden tomar consideración en el dictamen vinculado con el viajero”, explicó el Centro Cultural Islámico de Madrid.
Un viajero puede no ayunar a una distancia de alrededor de los 83 kilómetros. Si alguien viaja una distancia superior a esos 83 kilómetros, es considerado viajero y, por lo tanto, le está permitido dejar de ayunar durante el Ramadán y recuperar los días no ayunados antes del siguiente.
El Real Madrid estará muy atento a esta situación.
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