La sorpresiva salida de Christian Horner de Red Bull ha desatado una ola de especulaciones sobre su futuro en la Fórmula 1. Después de 20 años al mando del equipo más dominante de la última década, Horner se encuentra en busca de nuevos horizontes. Aunque Ferrari parecía una opción tentadora, Alpine está emergiendo como el destino más probable para el británico, especialmente considerando sus deseos de obtener una participación en el equipo.
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El deseo de Horner, ser dueño de su próximo equipo
El futuro de Horner en la Fórmula 1 está marcado por una condición clave: busca un papel de propiedad en su próximo equipo. Según medios europeos cercanos al dirigente, Horner no estaría interesado en ser solo un “empleado” más, y su deseo de tener un “stake” en el equipo es uno de los factores que haría menos probable su vinculación con Ferrari.

A diferencia de Ferrari, que busca una estructura propia sin intervenir demasiado en el manejo externo, Alpine le ofrecería un entorno más familiar, y la proximidad geográfica (Enstone está relativamente cerca de Milton Keynes) también facilita el proceso. Además, Horner ya tiene una relación de confianza con Flavio Briatore, director de Alpine, lo que podría ser una ventaja considerable.
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La rivalidad con Ferrari y las opciones que se abren
Aunque Ferrari es un equipo de renombre, Horner ya ha descartado la posibilidad de unirse a ellos. El ambiente competitivo y su histórica rivalidad con Lewis Hamilton hacen de Ferrari una opción compleja para Horner. De acuerdo a algunos rumores de paddock, la relación tensa entre Horner y Hamilton podría ser un obstáculo para su incorporación al equipo de Maranello.
Con Alpine siendo cada vez más una opción real, Christian Horner podría encontrar en el equipo francés la oportunidad de una nueva etapa profesional, donde sus habilidades de gestión, junto con su deseo de influir en la estructura del equipo, podrían ser claves para el éxito. Si Alpine se convierte en el siguiente capítulo de su carrera, podría ser el comienzo de una nueva era en la Fórmula 1.