La Liga le ha dado la razón al Barcelona en el conflicto que sostiene con Lionel Messi. Resuelve que el argentino debe reportar con el club, o pagar los casi 800 millones de euros que vale su cláusula de rescisión. La opción contractual que tenía Messi para abandonar Barcelona hasta antes del 30 de junio, no tendría por qué postergarse, según la entidad de futbol española.
Sin embargo, la Liga Española no es quién para pronunciarse en este tema, ni tiene la objetividad necesaria para emitir un juicio. Se decanta en favor del Barcelona, porque necesita que Messi permanezca en el futbol español. Tener al mejor jugador del mundo garantiza la llegada de patrocinadores y otorga ventajas, cuando se negocian derechos de transmisión; más aún en un momento de crisis económica.
La FIFA, el TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo) y el poder judicial español son quienes tendrán el veredicto en el divorcio entre club y futbolista. La Liga lo sabe, pero también entiende que su pronunciamiento inclina la balanza en favor del Barcelona. Nadie pagará los casi 800 millones de euros por liberar al argentino del año de contrato que le resta, pero el anuncio sí puede lapidar el ánimo de los clubes que pretenden llevarse gratis a Messi.
El mercado de traspasos en las principales competencias europeas cierra el 5 de octubre, aunque ya en dos semanas comenzarán los juegos. La ventaja parcial que le dio la Liga al Barcelona, sumada a la ansiedad de los interesados por contar con Messi a la brevedad, podría sentar a negociar a esos equipos con la directiva blaugrana un traspaso cercano a los cien millones de euros. Así la mano de La Liga mecería la cuna en la negociación, cuidando sus intereses y también los propios del Barcelona. No olvidemos que el cuadro culé apoya a la liga en su intención de llevar fuera de territorio español juegos de la competencia regular. Y es que: “favor, con favor se paga”.
Por Jorge Pinto/Azteca Deportes
