Diego Armando Maradona volvió a levantar polémica con una de esas frases que tiene muy bien guardadas y encuentra el lugar perfecto para explotar la bomba.
Maradona fue entrevistado por la revista France Football, la misma que otorga el premio Balón de Oro, para charlar sobre su vida y obra a propósito de los 60 años que cumplirá el “Pelusa” este viernes.
La edición francesa publicó un adelanto de la charla con el argentino -la entrevista completa saldrá este martes- en donde, entre otras cosas, habló de un sueño recurrente; una acción que le quedó pendiente y que tiene que ver con esa memorable tarde ante los ingleses en la cancha del Estadio Azteca, en los cuartos de final del mundial de México 86, en la cual Diego Armando selló la “Mano de Dios” y marcó uno de los goles más espectaculares en la historia de las Copas del Mundo.
Sueño con poder marcar otro gol para los ingleses ¡esta vez con la mano derecha!
Maradona reconoció a los mejores jugadores del mundo
Diego además respondió al cuestionamiento sobre quién le parecía actualmente el mejor futbolista del mundo, a lo cual respondió sin ninguna sorpresa pues se decantó por los más icón icónicos de los últimos 10 años.
Messi y Cristiano, Cristiano y Messi. Para mi, estos dos están muy encima de los demás; no veo a nadie acercándose a ellos. Ni uno solo logra la mitad de lo que hacen
El ex astro argentino contó la anécdota de cuando pudo ser jugador del Olympique de Marsella, de la Liga 1 de Francia, la cual iba por buen camino pero el presidente del Nápoles la echó abajo. Dijo que los dirigentes del Marsella habían entrado ya en contacto con él para ofrecerle el doble de lo que ganaba.
Estaba jugando en Napoli en ese momento y el presidente Ferlaino me dijo que si ganábamos la Copa de Europa -la cual consiguió después del triunfo sobre el Stuttgart- me dejaría ir. Bernard Tapie (presidente del Olympique) y Michel Hidalgo (entrenador del equipo) incluso vinieron a verme hasta Italia para hacerme una propuesta y para que lo discutiéramos todos juntos. Una vez que regresé a Nápoles -la reunión tuvo lugar en Milán- le dije a Ferlaino: Gracias presidente por todos estos hermosos años, me voy. En ese momento, comenzó a hacerse tonto, como si no entendiera y retrocedió, fin de la historia
