El malestar en el América, causado por la goleada ante el Querétaro la semana pasada, se acrecentó este sábado en la cancha del Estadio Azteca. Rayados le dio un paseo al equipo de Miguel Herrera, venciendo por 1-3 y llevando a las Águilas a recibir siete goles en dos compromisos.
El Monterrey fue mejor de principio a fin, aprovechando que los cremas siguen sin encontrar una idea de juego definida y cometen errores absurdos. El primero de ellos desencadenó el un tanto de penal al 27’, de Nico Sánchez, luego de una falta dentro del área de Emanuel Aguilera, quien acababa de entrar en lugar de Bruno Valdez, lesionado de forma aparatosa.
En los tres tantos de la visita colaboró la defensa de Miguel Herrera. Al 34’, Vincent Janssen empujó el esférico a las redes, luego de que la zaga no pudiera rechazar, y en la recta final del partido nuevamente falló el muro americanista en una jugada que acabó con todas sus esperanzas, firmada por Maxi Meza.
Las Águilas pudieron dar señales de vida únicamente por la vía del penalti. Aguilera acercó a los de Coapa al 75’, pero no fueron capaces de continuar generando peligro. Incluso fue Rayados el que pudo sellar los tres puntos con la ya mencionada jugada de Meza.
El regreso del América a su estadio contó además con un ingrediente particular: tres expulsiones. El primero en abandonar la cancha antes de tiempo fue Janssen, por una jugada accidental, que causó polémica, pero Fernando Guerrero no perdonó; El segundo fue Roger Martínez, quien recibió dos amonestaciones en un lapso de un minuto; y finalmente el hijo del ‘Turco’ Mohamed, Shayr Mohamed, quien estaba haciendo su debut, pero cometió una imprudente plancha sobre Sergio Díaz y vio la roja sin siquiera tocar la pelota.
En la recta final del encuentro, las Águilas informaron que Bruno Valdez se someterá a una resonancia magnética para determinar el alcance de su lesión en la rodilla izquierda.
