Samara, Rusia. El entrenador de Suecia, Janne Andersson, tiene plena confianza en las tácticas sencillas pero efectivas de su equipo de cara al partido del sábado ante Inglaterra por los cuartos de final del Mundial.
Los hombres de Andersson apuntan a meterse entre los cuatro mejores por primera vez desde 1994, cuando el equipo nórdico fue tercero en Estados Unidos.
El éxito de Suecia en este torneo, al que llegó tras superar a Holanda en la eliminatoria europea y a Italia en un repechaje, se ha basado en su gran organización defensiva y la explotación de los contraataques. Con esas tácticas ganó el Grupo F y eliminó a Suiza en octavos de final.
Andersson dice que es poco probable que su equipo sorprenda al entrenador de Inglaterra, Gareth Southgate.
“Una vez hubo un entrenador que dijo que su equipo era bastante fácil de analizar pero difícil de superar. Esa es una buena descripción para nosotros”, dijo Andersson el viernes a periodistas. “No debería ser tan difícil tener una idea de lo que hacemos”.
“Defendemos a muerte nuestras creencias. Los jugadores son muy leales a nuestras ideas”, agregó.
El capitán Andreas Granqvist es quien más ha abrazado esta filosofía colectiva. El defensor de 33 años formó una formidable dupla de centrales con Victor Lindelof y anotó dos veces desde el punto del penal en Rusia.
“Somos un equipo y hacemos esto juntos, dentro y fuera del terreno de juego, y eso es lo que cimenta nuestro éxito”, dijo Granqvist. “Puede que no tengamos el mejor equipo en el papel o individualmente, pero como equipo somos muy exitosos y esto nos simboliza a todos”.
Si Suecia derrota a Inglaterra, un equipo ante el que solo ha perdido dos veces en los últimos 15 choques entre ambos, enfrentará en semifinales al vencedor de la llave entre Rusia y Croacia.
Reuters
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