¡Dos años de muerte y destrucción! Así va la guerra en Ucrania en su segundo aniversario
Hoy 24 de febrero de 2024 se cumple el segundo aniversario del inicio de la guerra en Ucrania; dos años de muerte y destrucción tras la invasión de Rusia.
Segundo aniversario del inicio de la guerra en Ucrania; dos años de muerte y destrucción. El escalofriante canto de las sirenas de alarma comenzó a sonar por primera vez la madrugada del 24 de febrero del 2022 y al día de hoy 24 de febrero 2024, los enormes altavoces que lo interpretan aún desconocen la tregua.
La invasión de Rusia a Ucrania cumplió dos años de muerte y destrucción, 730 días de un conflicto armado que la diplomacia sólo ha intentado apagar con gasolina. El pronóstico parecía claro, la victoria del todo poderoso ejército de Vladimir Putin aplastaría al bastión ucraniano en semanas, meses cuando mucho. Nada más alejado de la realidad, dos años después la guerra aún respira, lastima.
La invasión provocó el mayor éxodo desde que el nazismo devastara Europa en el primer lustro de la década de los cuarentas. Además de los millones de refugiados del choque entre rusos y ucranianos ha dejado más de 10 mil muertos y más de 20 mil heridos.
“Se estima que 1.5 millones de niños en Ucrania corren riesgo de sufrir depresión, ansiedad, trastorno de estrés postraumático y otras afecciones de salud mental”, señala Mustapha Ben Messaoud, líder del programa Unicef en Ucrania. Todo según cifras de la Organización de las Naciones Unidas (ONU); muda permanente, inoperante histórica ante cualquier conflicto impulsado por alguna de las potencias mundiales.
Lo que Estados Unidos apoya recibe el revés ruso o chino y viceversa. Lo que parecía un encontronazo fugaz se ha convertido en una guerra de desgaste, donde lo único que avanza religiosamente cada 24 horas es la sangría de vidas perdidas.
Ucrania retoma algunos territorios pero no logra desterrar a los rusos. Rusia amenaza con avanzar pero no destruye la fuerza de voluntad ucraniana, alimentada por miles de millones de dólares en armamento y entrenamiento militar, transfundido desde la Unión Europea y la Casa Blanca.
“Todos sabemos que Ucrania está luchando por nosotros, así que los apoyaremos con la financiación necesaria... Y creo que estos 50 mil millones de euros para cuatro años también envían un mensaje muy fuerte a Putin, justo en el segundo aniversario de su brutal invasión”, señala Úrsula Von Der Leyen, presidenta de la Comisión Europea.
En dos años de agresiones el mercado petrolero, las divisas y la exportación de cereales se han subido y bajado de una montaña rusa que no se detiene. Las sanciones económicas caen sobre el Kremlin como racimos de uvas al ocaso del verano pero nada parece debilitar al presidente Putin, sino todo lo contrario; su nueva reelección es mero trámite: “Me postularé para el cargo de presidente de la Federación Rusa”.
Sus enemigos desaparecen ante los ojos del mundo sin consecuencia alguna; Así murió el líder del Grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin, en agosto del 2023; así también lo hizo Navalny el 16 de febrero pasado.
La voz del panorama mundial asegura que a mediados de año el embate del ejército rojo se fortalecerá. El capítulo final de esta historia aún no cuenta con la tinta suficiente para escribirlo. El presente dicta que la guerra ruso-ucraniana, respira saludable con los pulmones repletos de dolor.
¿Cuándo comenzó la guerra en Ucrania?
De hecho la guerra de Rusia en Ucrania comenzó hace diez años con la anexión de Crimea en febrero de 2014, un hecho que con el paso del tiempo fue subestimado, incluso por el mismo pueblo ucraniano, sin embargo este hecho cambió con la expansión de la guerra para el año 2022.
Durante la jornada del 27 de febrero de 2014, hombres armados y con uniformes sin emblemas ocuparon el Parlamento y la administración regional de la península de Crimea; más tarde, el presidente Vladimir Putin admitió que eran soldados rusos.
En aquel entonces, el gobierno no se atrevió a defender Crimea con armas mientras que Occidente aconsejó a Kiev para que actuara con moderación, pero para la primavera de 2014, comenzó la guerra en la región ucraniana oriental de Donbás. Rusia colocó a su propia gente al frente de las fuerzas prorrusas en Donetsk y Lugansk y las armó en secreto.
El mundo occidental intentó mediar y congelar el conflicto mediante negociaciones, además de que Ucrania no impuso la ley marcial y la guerra se calificó de una operación antiterrorista.
