Más frío que su ensalada: Rusia enfrenta temperaturas de hasta -56 grados
La región de Siberia, en Rusia, los habitantes deben lidiar con el termómetro que indica -56 grados Celsius; otras regiones también enfrentan heladas.
El termómetro en la región de Siberia, en Rusia , llegó a -56 grados Celsius ayer lunes, mientras que tormentas de nieve dejaron a la capital, Moscú, con nevadas que superaron las marcas históricas y afectaron varios vuelos.
En la región de Oymyakon, en la República de Sajá, en Siberia, el lunes por la noche la temperatura bajó hasta los -56 grados, mientras que los meteorólogos locales señalaron que las personas podrían percibir una temperatura de hasta -60 grados, debido al viento y la humedad en el aire.
El Servicio Meteorológico de Rusia señaló que en dicha región, así como en los Montes Urales y en la parte europea del país, las heladas aumentarán el resto de la primera semana de diciembre.
Ola de frío afecta a varias regiones de Europa
Mientras que en otras partes del mundo, como en Inglaterra , cayó una nevada de hasta 30 centímetros en Cumbria, al norte del país. Debido a ello, una docena de escuelas debieron cerrar sus puertas y más de 200 vehículos quedaron variados en la nieve.
La nevada cayó en apenas un par de horas ayer 4 de diciembre y el departamento de meteorología local pronosticó condiciones heladas, lluvia y nieve en las montañas para este martes.
Los servicios de emergencia señalaron que el hielo provocó varios incidentes, ya que debieron atender potenciales ataques cardíacos, así como heridas espinales debido a accidentes en trineo.
En tanto que en Alemania, los vuelos desde y hacia Múnich debieron ser cancelados e incluso las aerolíneas pidieron a sus pasajeros que no acudieran al aeropuerto si no tenían su vuelo confirmado. Además, los viajes al sur del país también tuvieron que ser suspendidos debido a la gran cantidad de nieve.
Incluso debido a la intensidad de la tormenta invernal en Bavaria llevó al cierre de los mercados navideños y un partido de futbol debía ser cancelado, mientras los habitantes de la ciudad lidiaban con las condiciones climáticas.