Con solo 8 años, Andy ha luchado la mitad de su vida contra la Atrofia Muscular Espinal (AME) Tipo 2 y un sistema de salud que le negaba su tratamiento. Durante cinco largos años, su familia se enfrentó a negativas y malos tratos por parte del Seguro Social para obtener el medicamento Risdiplam, vital para frenar el avance de esta devastadora enfermedad; sin embargo, no se rindieron.

A través de un amparo, una orden judicial finalmente obligó a la institución a garantizar su derecho a la salud. Esta es la historia de una victoria legal que representa una esperanza para miles de pacientes en México que enfrentan el desabasto de medicamentos.

Una lucha de 5 años por el derecho a la salud en México

Después de un brillo de batalla legal y desgaste emocional, la familia de Andy por fin celebra una victoria que le cambiará la vida. Andy, una niña de 8 años diagnosticada con Atrofia Muscular Espinal (AME) Tipo 2, ha comenzado a recibir el tratamiento que necesita para detener el progreso de su enfermedad, un logro que solo fue posible gracias a un amparo.

“Soy mamá de Andy, ella tiene 8 años de edad, tiene atrofia muscular espinal tipo 2, pues ahorita estamos muy contentos porque por fin ella ahorita está con su tratamiento, este tratamiento que frena el avance de esta horrible enfermedad”, comparte Lucía.

El camino no fue fácil. Durante cinco años, los padres de Andy, Edgar y Lucía, tocaron incansablemente las puertas del Seguro Social (IMSS), donde afirman haber recibido un trato adverso.

“Recibimos malos tratos, recibimos tratos negligentes, humillantes en donde nos lo negaron completamente, por ese motivo nosotros tuvimos que acudir a realizar un amparo para realizar la petición vía legal”, detalla Lucía. Su esposo complementa el sentimiento de frustración: “Son cinco años de sufrimiento, cinco años de desvelo, cinco años que seguimos tocando mil puertas, cinco años donde el Seguro Social nos ha cerrado las puertas”.

Los efectos del tratamiento ya son notorios para Andy, quien con una sonrisa relata los pequeños grandes logros que ahora puede alcanzar: “Ahora puedo hacer más cosas... pues cambiarme y alzar la mano, antes no podía”.

El amparo: la herramienta legal que cambió para una niña enferma

Ante la negativa sistemática y el elevado costo del medicamento, la familia, apoyada por la organización Perteneces AC, recurrió a la figura del amparo. Tras obtener tres dictámenes periciales que confirmaban la necesidad del fármaco, un juez federal ordenó al IMSS suministrarlo.

“Se acordó que era Risdiplam su tratamiento correcto y ahorita nos dijeron que era brindarlo por 12 meses, después de esos 12 meses van a volver a realizar una evaluación de Andy para verificar su estado de salud”, explica su mamá.

Paulina Martell, abogada de la organización, subraya la importancia de esta resolución judicial en un contexto nacional complejo. “Lamentablemente, como Andy, hay millas de personas, millas de niñas y niños que están padeciendo por este desabasto de medicamentos que sabemos existe en el país. Esto se logró gracias a una orden judicial”.