El narcotráfico en México ha evolucionado durante décadas, transformándose de estructuras piramidales a redes transnacionales complejas que operan con sofisticación y violencia. En este contexto, la segunda generación de narcotraficantes, hijos de los capos históricos, ha tomado el relevo en la conducción de los cárteles más poderosos del país.
Estos herederos no solo mantienen el control de las rutas y la producción, sino que también enfrentan la presión constante de las autoridades y cárteles rivales; sin embargo, muchos de ellos ya han caído ante la presión binacional de México y Estados Unidos, por lo que el panorama cambia constantemente.
A continuación, un análisis detallado de quiénes son estos personajes y cómo operan en la actualidad.
Los Chapitos: Los herederos del Cártel de Sinaloa
Tras la caída y extradición de Joaquín “El Chapo” Guzmán, su familia ha consolidado el control de una de las organizaciones criminales más poderosas y longevas de México: el Cártel de Sinaloa. La facción conocida como Los Chapitos está liderada por sus hijos, quienes han asumido roles estratégicos en la producción, tráfico y distribución de drogas, principalmente cocaína y metanfetaminas.
- Iván Archivaldo Guzmán Salazar, apodado “El Chapito”, es considerado el líder principal de esta generación. Su perfil criminal lo ha colocado en la lista de los más buscados por la DEA, y se le atribuye la capacidad de mantener la cohesión interna del cártel en un contexto de fragmentación y violencia.
- Jesús Alfredo Guzmán Salazar, conocido como “El Alfredillo”, dirige una facción paralela y ha sido objeto de investigaciones internacionales. Su notoriedad aumentó tras la viralización de una supuesta selfie con la actriz Kate del Castillo, pero estalló tras el ascenso de Iván Archivaldo.
- Ovidio Guzmán López, “El Ratón”, hijo de la segunda esposa de El Chapo, fue capturado y extraditado a Estados Unidos. A pesar de ello, sigue siendo una figura clave dentro del cártel, y su detención generó violentas represalias en Sinaloa, recordadas como “El Culiacanazo”.
- Joaquín Guzmán López, “El Güero”, hermano de Ovidio, también ha sido señalado como un operador importante, especialmente en la producción de metanfetaminas. Su captura sigue generando intriga, pues llegó en un avión a Texas con “El Mayo” Zambada, en lo que La Mayiza ha denunciado como un secuestro y entrega pactada con Estados Unidos.
Estos líderes han sabido adaptar la estructura del cártel a un modelo más horizontal y basado en redes transnacionales, lo que les permite diversificar sus actividades ilícitas y mantener el control en varias regiones del país.
La familia Zambada: El otro pilar del Cártel de Sinaloa
Ismael Zambada García es el otro gran capo histórico del Cártel de Sinaloa, cuya influencia ha sido fundamental para la supervivencia y expansión de la organización. Mientras “El Mayo” permaneció prófugo durante años, sus hijos tomaron un rol protagónico en la operación y dirección del cártel, pero se consolidó tras su arresto en Estados Unidos.
- Ismael Zambada Sicairos, conocido como “Mayito Flaco”, es señalado como uno de los principales operadores y el actual heredero del legado criminal de su padre. Su ascenso coincide con la captura de El Mayo, y es considerado uno de los objetivos prioritarios para las autoridades estadounidenses y mexicanas.
- Ismael Zambada Imperial, apodado “El Mayito Gordo”, es otro de los hijos varones, quien ha tenido participación activa en la organización. Fue capturado por la Armada de México en Culiacán, pero se mantiene como una figura relevante dentro de la estructura criminal.
- Jesús Vicente Zambada Niebla, conocido como “El Vicentillo”, es quizá el más conocido de los hijos de “El Mayo”. Nacido en 1975, fue uno de los principales líderes del Cártel de Sinaloa y considerado en su momento el heredero natural del imperio criminal. Fue arrestado en 2009, extraditado a Estados Unidos y se convirtió en testigo protegido, colaborando en el juicio contra Joaquín “El Chapo” Guzmán.
La familia Zambada mantiene una alianza y a la vez una rivalidad interna con Los Chapitos, lo que ha generado tensiones y enfrentamientos dentro del cártel que repercuten en la violencia regional.
El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y la sucesión de El Mencho
El CJNG es la organización criminal que más ha crecido en los últimos años, desplazando a otros grupos en varias regiones de México. Su líder, Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”, es uno de los criminales más buscados del mundo y se mantiene como máximo responsable de la organización criminal, sin un claro heredero en el camino.
- Rubén Oseguera González, apodado “El Menchito”, es hijo de El Mencho y en su momento fue señalado como su sucesor natural; sin embargo, fue detenido y condenado a cadena perpetua en Estados Unidos por cargos de narcotráfico y uso ilegal de armas, .
El CJNG ha sido responsable de una escalada de violencia en estados como Jalisco, Michoacán y Veracruz, y la figura de El Menchito representa la continuidad de esta organización que desafía al Estado mexicano.
Otros grupos y la influencia familiar
Aunque los cárteles como La Familia Michoacana, Los Zetas, el Cártel del Golfo y el Cártel del Noreste cuentan con estructuras complejas, la presencia pública de hijos de capos al frente es menos evidente o está más fragmentada. Sin embargo, la dinámica de herencia y sucesión familiar es común en estas organizaciones, donde la violencia y la corrupción marcan el control territorial.
La segunda generación de narcotraficantes, representada por los hijos de los capos históricos, ha sabido adaptarse a esta evolución, manteniendo el poder mediante alianzas, violencia y sofisticación operativa. La disputa entre Los Chapitos y la familia Zambada dentro del Cártel de Sinaloa, así como la expansión del CJNG bajo la sombra de El Mencho y su gente cercana, configuran el escenario actual del narcotráfico en México.
