Lucía se ve y se siente muy cansada porque le han tocado varias guardias seguidas, esto gracias a los horarios asignados por Mariana. La señora Manuela le regala un escapulario de San Jorge para que la cuide.
Mariana y Patricio continúan con su aventura en el hospital, pero ella le deja muy claro que no tiene la intención de mantener una relación romántica con él, ni con nadie más.
Manuela debe limpiar la oficina de Mariana y alcanza a ver en la pantalla de la computadora las compras desmedidas de medicamentos.
En esta ocasión, una joven que entregaría un paquete en la calle, se desmalla justo en la parada de autobuses, afortunadamente la gente la ayuda y solicitan una ambulancia. Al llegar al hospital Dra. Lucía la revisa para dar un diagnóstico, aunque sus síntomas no son muy claros.
La abuelita de Sarita tiene un accidente y deben llevarla al hospital. Lucía usa su don y después de la visión tiene emociones y sensaciones nuevas, esta vez, tristes y aterradoras. Patricio es golpeado por un desconocido al salir de un bar.