No siempre hay que gastar una fortuna en suplementos para cuidar articulaciones, huesos o piel. A veces, lo que necesitamos ya está en nuestra cocina. Hay una mezcla superfácil de colágeno casero que varias personas usan para darle un empujoncito natural al colágeno del cuerpo, y solo lleva cáscara de huevo y limón. Así de simple.
Según información del Journal of Clinical Biochemistry and Nutrition, la cáscara de huevo —que normalmente tiramos sin pensar— está llena de calcio y tiene una membranita que es rica en colágeno tipo I.
Y el limón, con toda su vitamina C, ayuda a liberar ese colágeno y mejora su absorción. La mezcla parece rara, pero tiene lógica. Y lo mejor: no cuesta casi nada.
¿Para qué sirve este colágeno natural hecho en casa?
Aunque muchas veces el colágeno se relaciona solo con belleza, lo cierto es que también juega un papel clave en cómo nos movemos, cómo se sienten nuestras articulaciones, y hasta en la salud de los huesos.
Este preparado casero puede ser un buen complemento si lo que se busca es fortalecer desde adentro:
- Ayuda a las articulaciones: Regenera cartílago y puede aliviar molestias del desgaste.
- Mejora la elasticidad de la piel: No borra arrugas, pero sí puede ayudar a que la piel luzca más firme.
- Apoya la salud ósea: La cáscara tiene calcio, y eso siempre suma.
- Fortalece uñas y cabello: Si andan débiles o se rompen fácil, este colágeno puede ayudar.
No es magia, pero sí es una opción sencilla que puedes preparar en casa y que vale la pena intentar.
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¿Cómo se prepara este colágeno casero paso a paso?
No tiene mucha ciencia, pero es importante hacerlo bien para aprovechar todo lo que puede ofrecer:
- Lava muy bien dos cáscaras de huevo (mejor si son orgánicas).
- Déjalas secar por completo y muélelas hasta hacerlas polvo fino.
- Exprime el jugo de un limón.
- En un frasquito de vidrio, mezcla el polvo con el jugo y déjalo reposar 12 horas.
- Al día siguiente, toma solo una cucharadita al día, diluida en agua o jugo natural.
¿Un tip extra? Combinarlo con alimentos ricos en vitamina C (como guayaba, kiwi o pimientos rojos) y tomar suficiente agua. Eso ayuda a que tu cuerpo lo absorba mejor.
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Este tipo de preparaciones no sustituyen una alimentación balanceada, pero sí pueden sumar puntos si lo que se busca es cuidar el cuerpo de forma más natural. Y lo mejor: sin gastar de más ni salir a buscar ingredientes raros. A veces, la solución está justo donde menos la esperas.
