El Barcelona empató 0-0 este martes en el Camp Nou ante el Benfica en la quinta jornada de la Liga de Campeones, resultado que le obliga a ganar el último partido en el campo del Bayern Múnich para asegurarse la clasificación para los octavos de final.
Aunque el cuadro luso pudo adelantarse antes del descanso en un cabezazo de Yaremchuk que rechazó Ter Stegen, la oportunidad más clara del primer tiempo fue un remate de Demir que se estrelló en el larguero.
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La reaparición de Dembélé, inactivo desde el 2 de noviembre a causa de la lesiones, añadió colmillo al Barcelona, que pudo lograr la victoria en un centro del galo cabezeado por De Jong que salvó Vlachodimos y en un gol anulado a Araujo por fuera de juego.
Dembélé despierta al Camp Nou
La reaparición de Ousmane Dembélé, que con su velocidad y regate revolucionó el ataque azulgrana tras el descanso, fue la novedad más celebrada este martes por la afición barcelonista en el empate 0-0 ante el Benfica en la Champions League.
El regreso del delantero francés, que esta temporada había disputado únicamente 25 minutos en el Dinamo de Kiev-Barcelona del 2 de noviembre a causa de la lesiones, avivó los ánimos de un Camp Nou algo frío en los trabados compases iniciales de la segunda parte.
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Dembélé recibió una ovación cerrada cuando salió a calentar y otra todavía más intensa cuando a los 66 minutos saltó al terreno de juego para reemplazar a Yusuf Demir, además de despertar el murmullo en la grada casi cada vez que tocaba el balón.
Pese a diluirse la efervescencia inicial, Dembélé fue el más insistente entre los delanteros del cuadro azulgrana y en el minuto 78 buscó un pase filtrado al que llegó antes Vlachodimos que De Jong.
EFE
