El nadador australiano, Ian Thorpe estaba en Nueva York aquel 11 de septiembre de 2001, y su historia sobre ese terrorífico día le ha dado la vuelta al mundo durante estas dos décadas de que ocurriera un hecho que cambiaría al mundo.
El olvido que lo salvó
El múltiple medallista olímpico decidió ese día salir a correr y como destino tenía el mirador del World Trade Center; sin embargo en algún punto del camino se dio cuenta que había olvidado su cámara por lo que tomó un taxi y regresó a su hotel.
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Thorpe encendió su televisor y vio una de las torres gemelas en llamas por lo que ese día en palabras del mismo atleta, “volvió a nacer”.
Una vida junto a la natación
Ian James Thorpe, nació el 13 de octubre 1982 y era apodado el “Thorpedo”. El atleta oceánico ganó cinco medallas de oro en Juegos Olímpicos, siendo la mayor marca conseguida por cualquier deportista australiano, y en 2001 se convirtió en la única persona en ganar seis medallas de oro en un solo Campeonato Mundial de Natación.
En total, Thorpe ganó 11 medallas de oro en esta competición, la segunda marca conseguida por cualquier nadador, además Ian es la única persona junto a Michael Phelps en ser nombrada Nadador del Año en cuatro ocasiones por la revista Mundo de la Natación (Swimming World Magazine), y fue el Nadador Australiano del Año de 1999 a 2003.
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Sus logros atléticos lo han convertido en uno de los atletas más populares de Australia, y se le reconoció como Joven Australiano del Año en el 2000.
Este sábado se cumplen 20 años del terrible ataque terrorista y sin duda, la anécdota de Ian Thorpe es una de las muchas historias que nos seguirá erizando la piel.
