La actriz de cine y televisión mexicana Bárbara de Regil mostró sus imperfecciones ante la cámara, confesando que tienes los dientes chuecos y hasta juanetes. Sin pudor ni miedo al rechazo, destacó que lo único realmente importante es la personalidad.
Fue durante una alfombra roja, que la actriz, de 35 años, confesó ante medios de comunicación que aprendió a aceptar su cuerpo tal y como es; “tengo defectos que ni siquiera veo como defectos ya”. Lo anterior al destacar que tiene franjas o líneas irregulares de la piel que se producen generalmente por el estiramiento de la misma, también conocidas como estrías.
“También tengo juanetes y hasta los dientes chuecos”, continuó revelando Bárbara de Regil al descubrir las partes de su cuerpo que antes eran consideradas vulnerables; sin embargo, hoy en día la enorgullecen, tanto así que ni siquiera lucha por ocultarlas utilizando maquillaje, sino todo lo contrario las muestra con orgullo.
Bárbara de Regil asegura que lo más importante es la personalidad
La también influencer, de 35 años, famoso por participar en series como ‘Rosario Tijeras’ o ganar terreno en el cardio motivacional, destacó que nadie debería ocultar sus imperfecciones, pues caminar con la cabeza agachada, la gente se da cuenta; “pero cuando uno llega seguro de sí mismo y dices, ‘tengo los dientes chuecos, me vale gorro’, como que no lo ves, ves la personalidad’, finalizó.
Bárbara de Regil es una de las figuras más reconocidas en el mundo del fitness, debido al espectacular cuerpo que la también actriz de 35 años ha logrado formar con el paso del tiempo, pero también al promover eventos motivacionales para sus fans.
A través de redes sociales, la también actriz se dedica a predicar el esfuerzo que la ha mantenido a flote en el mundo del fitness, siempre destacando que desde hace ya 10 años ha trabajado no solo para transformar su cuerpo, sino también por un cambio de mentalidad que la ayuda a llevar una vida estable y lejos de los prejuicios.
Según ha indicado, en diversas entrevistas, desde que ha tomado la decisión consciente de cuidar no solo su cuerpo y su entorno ha logrado llevar una vida mucha más feliz, rodeada de personas que la quieren y aprecian por su verdadero valor.