Lo que comenzó como una jornada de protesta, terminó en un episodio más de tensión y violencia en el corazón de la Ciudad de México. Este miércoles, integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) intentaron ingresar por la fuerza a la Secretaría de Gobernación (Segob), en la avenida Bucareli, en medio de una nueva mesa de negociación con autoridades federales.
Los manifestantes lanzaron piedras, palos y amenazas, incluso amagaron con prender fuego a un vehículo de la Secretaría del Bienestar. Los policías capitalinos respondieron usando extintores para dispersar a los agresores y contener el avance hacia el edificio.
Reunión sin acuerdos y exigencias radicales
Al interior de la Segob, representantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) sostenían una mesa de diálogo con funcionarios de Gobernación, Educación, Hacienda y el ISSSTE. Sin embargo, no hubo acuerdos, ya que los líderes sindicales mantuvieron exigencias como:
- La abrogación de la Ley del ISSSTE de 2007
- Un aumento salarial del 100%
- El retiro de las últimas dos reformas educativas
Pedro Hernández, líder de la sección 9, criticó al gobierno por “robar los fondos de los trabajadores” y aseguró que el movimiento seguirá firme. Por su parte, Yenny Aracely Pérez Martínez, de la sección 22, dijo que consultarán con sus bases las acciones futuras del magisterio disidente.
Campamento sigue en el Centro y caos se agudiza
Mientras las negociaciones fallan, el Centro Histórico sigue secuestrado por el campamento de la CNTE, instalado desde hace más de 20 días y dejando a más de un millón de estudiantes sin clases en todo ese periodo.
Los comerciantes de la zona denuncian pérdidas millonarias, mientras que miles de ciudadanos padecen a diario los bloqueos, desvíos y afectaciones al transporte público.
El conflicto parece lejos de resolverse, y aunque las autoridades aseguran mantener el diálogo abierto, la realidad en las calles refleja otra cosa: tensión, caos vial y una ciudadanía atrapada entre intereses políticos y demandas sin respuesta.
