Mulegé, BCS.- Autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia aseguran que la zona arqueológica de pinturas rupestres puede sufrir daños, pues los grafitis o el robo de piezas son parte de las afectaciones que realizan los visitantes.
El lugar, localizado en la Sierra de San Francisco y Santa Martha, es vigilado por custodios del INAH así como por un grupo de pobladores, ya que aseguran, los daños pueden ser efectuados tanto por turistas nacionales como por extranjeros.
En entrevista para Azteca Noticias, Ma. de la Luz Gutiérrez Martínez, Delegada del INAH en BCS, detalló que los custodios desarrollan su trabajo en los doce cañones que tienen ambas sierras con el objetivo de proteger el patrimonio.