Inversionistas y residentes del Club de Golf “Tangolunda” buscan revertir el daño hecho por el Gobierno Federal

Mediante amparos, los inversionistas y residentes del Club de Golf “Tangolunda” en Huatulco buscan revertir el daño hecho por el Gobierno Federal.

Por: Federico Anaya

Ya son 16 las solicitudes de amparo interpuestas por inversionistas y residentes afectados por los cuatro decretos presidenciales que pretenden declarar Parques Nacionales los terrenos de Huatulco que son parte del plan de desarrollo municipal, incluido el Club de Golf “Tangolunda”.

“Es un acto de brutalidad, la verdad es un impacto tan fuerte de carácter social y económico para la gente que vive ahí, no podría ahorita medir o cuantificar materialmente, porque es a muy largo plazo.”, señala la abogada Ana María Cruz.

Se violaron los derechos humanos y soberanía municipal tras irrupción en Club de Golf “Tangolunda”

Los habitantes se defienden contra una medida que le restó plusvalía a sus propiedades. Juan Vargas, uno de los afectados, muestra preocupación por toda la actividad comercial.

“Uno tiene una propiedad con vista al Club de Golf y de repente si ese campo de golf ya no va a existir pues la propiedad pierde todo su valor. Desincentiva la inversión en esa zona."agrega Juan Vargas.

“Lo primero que se afecta en su propiedad es en su valor, definitivamente se demerita el valor. Se violó la soberanía del Estado, se violó la soberanía municipal.”, apunta la exmagistrada y representante legal de los afectados, quien sostiene que ningún decreto puede pasar por encima de los derechos humanos.

Decreto presidencial no obedece a Plan Nacional de Desarrollo: Abogada

La litigante también asegura que el decreto no solo viola la soberanía municipal y estatal, sino que es una decisión sacada de la manga.

“Para esto hay un Plan Nacional, pero el Presidente no obedece a ese Plan Nacional, tiene ocurrencias. Pero yo creo que el Presidente no conoce el Plan Nacional de Desarrollo, ni cómo opera y se mete a un estado y se mete a un municipio a hacer desastres.”, puntualizó la abogada.

Para los afectados esos decretos no tienen razón de ser, ya que están destinados a correr con la misma suerte, el abandono.

Yo creo que esos decretos de áreas naturales protegidas son para lavarse la cara del ecocidio del Tren Maya.

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