Al preguntarle si cree más en el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador o en “El Chapo”, la actriz Kate del Castillo dijo que no sabe aunque reconoce las “buenas intenciones” hacia su persona del mandatario mexicano.
“Tengo mucha esperanza y mucha luz”, agregó. Respecto a la reunión con el narcotraficante señaló que no se arrepiente de nada pero hará más caso a su intuición “yo no trabajo con la autoridad y no era mi deber”.
Por su parte, su abogado Federico Mery-Sanson recalcó las acciones de las autoridades y mencionó que no es un delito realizar una entrevista hasta llegar al grado de estigmatizar.

Lamentó que se le haya estigmatizado por lavado de dinero y afirmó que no cometió ningún delito aunque sí fue víctima de una persecución política. Por lo anterior, pidió una indemnización de 60 mdd por daño material y moral.
En 2014 autoridades de la PGR señalaron que “El Chapo” pidió a sus abogados buscar a del Castillo para que los asesorara en la producción de una película autobiográfica.
Dos años más tarde, se inició una investigación en su contra argumentando que recibió recursos financieros del capo para su empresa de tequila, en la cual continúa realizando varias actividades.
En febrero de 2017 la PGR canceló la orden de localización y presentación en contra de la actriz. Sobre la tercera temporada de “Ingobernable” dijo que aún está en negociaciones y si se hiciera, le gustaría que fuera realizada en México.

También habló de sus actividades en el sector tequilero. Alrededor de 100 medios acudieron a la conferencia de prensa en el piso 51 de la Torre Mayor en Paseo de la Reforma, luego de una ausencia de casi tres años en tierras mexicanas. Estuvo acompañada por sus abogados Mery-Sanson, Alejandro Rojas Pruneda y Humberto Ferro Barranda.