Jonathan no puede creer que su suegra Socorro le prestó el dinero, que él y su novia Eugenia ahorraron para su boda, a su esposo Héctor para gastarlo en alcohol y apuestas.
Jonathan no puede creer que su suegra Socorro le prestó el dinero, que él y su novia Eugenia ahorraron para su boda, a su esposo Héctor para gastarlo en alcohol y apuestas.