La familia de su esposo tiene una curiosa y para muchos, perturbadora, tradición en la que sacan los restos de sus familiares del panteón para comer junto a ellos. Ana relata que fue a visitar la tumba de su esposo junto a sus hijos y cuando llegó, se llevó una terrible sorpresa, pues descubrió que alguien había exhumado los restos de su esposo.