Rey moviliza a su gente de seguridad para intentar controlar la cabina, sin éxito, el Capitán se encuentra ahí. Nora y Úrsula reparten la información de Raúl Rey entre la prensa asistente. El evento es interrumpido por Mariana, quien cuenta todos los delitos de Rey empezando por todo lo que hizo con ella y con su amigos, las palabras de Mariana se respaldan con pruebas que se proyectan en las pantallas gigantes. Rey trata de hacer callar a Mariana, pide que la saquen pero nadie le hace caso.
En EU, el miedo aparece en el rostro de Johnson al escuchar su nombre en la voz de Mariana y ver sus fotos en las pantallas. Mariana nombra uno a uno los crímenes de Rey y ni él ni Tuétano pueden hacer nada. La gente en el auditorio arde en furia, gritos de “asesino”, “corrupto” se hacen escuchar. Rey sale del escenario y trata de escapar con la ayuda de Tuétano quien le indica la ruta a seguir, Claudia sigue siendo su rehén. Silvia se queda sola, Rey la deja atrás con Citlali y Raulito. Santiago va tras Rey.
Mariana por fin encuentra a Alejandro y le puede reclamar por fingir su muerte, los dos confirman cuanto se aman con un beso apasionado, todo está por terminar. Hay autorización del alto mando para detener a Rey. Al pretender escapar, Rey es interceptado por Alejandro quien transmite en vivo, Rey no puede hacer nada. Santiago le pisa los talones a Tuétano, quien tiene a Claudia consigo. Al final, Rey sí saca la pistola y le apunta a Alejandro, pero Mariana le cubre la espalda y también le apunta a él.
El ejército está rodeando el lugar, Rey no tiene escapatoria. La organización se encarga de Johnson, quien cae muerto. Mariana está a punto de dispararle a Rey, pero recibe un disparo de alguien mas. Por su parte, Santiago logra rescatar a Claudia, pero Tuétano se escapa. Rey es trasladado al hospital, los paramédicos creen que no sobrevivirá. Alejandro, Mariana y Santiago se abrazan aliviados, todo terminó. Silvia se va detenida. Rey sobrevivió, Santiago no pasa a verlo, solo le deja el video que grabó Teresa y se marcha. Claudia se mudará a Mérida con Luis, sabe que Santiago no la ama y no quiere estar cerca de él, le hace daño.
Como Rey no murió, Silvia no está en prisión, pero no puede salir del país, está derrotada. La policía dejo la oficina de Rey vacía, lo único que quedó atrás, fue una foto de él con su madre. Mariana y Alejandro por fin consuman su amor sin temores ni preocupaciones, todo terminó. Días después, Tony afina los últimos detalles de la boda entre lágrimas. En prisión, Rey no se queda con los brazos cruzados, está tramando algo junto a Tuétano. Santiago busca a Mariana para agradecerle por todo, y para confirmarle que entendió que lo que tiene con Alejandro es más fuerte que todo.
Todo está listo para la boda y Zippy aprovecha para preguntarle a Úrsula sobre su relación, quedan como amigos. En el atrio, Mariana recuerda a quienes no están en ese momento tan especial, Elena, Chucho, Gustavo, Quevedo, Alba. Tony le recuerda que están presentes, aunque no físicamente. Ya no hay obstáculos, el futuro de Mariana es gigante, él siempre supo que su corazón no murió, la entrega a Alejandro en el altar.
Claudia ya está lista en el aeropuerto con Luis lista para irse a Mérida, él no para de preguntarle por Santiago, quien la llama y la busca sin éxito. Rey recibe a su abogado en su celda. En el sonido local del aeropuerto, Santiago intenta detener a Claudia, lo único que puede decirle es que la ama, por fin se encuentran y se besan, a su manera. Tuétano los acecha, pero no hace nada contra ellos. Mariana y Alejandro unen sus vidas acompañados de todas las personas que los los aman. En la celda de Raúl Rey, su supuesto abogado duerme con ropas del reclusorio. Raúl Rey está impecablemente vestido y da una orden por teléfono, suenan disparos.
