Al igual que cualquier ciudadano convencional de México y como en las apuestas deportivas, los jugadores profesionales de futbol deben pagar impuestos al Gobierno. En este caso, los futbolistas mexicanos pagan el Impuesto sobre la Renta (ISR) al Servicio de Administración Tributaria (SAT) sobre sus ingresos. En esto se incluyen sus salarios , premios, bonificaciones y cualquier otro ingreso relacionado con su actividad profesional.
El monto a pagar de cada jugador se determina según las tarifas progresivas del ISR, que varían dependiendo del nivel de ingresos . En este contexto, el ISR se calcula de la siguiente manera:
- Determinar el ingreso total anual: Sumar todos los ingresos del jugador a lo largo del año.
- Aplicar las tarifas progresivas: Utilizar la tabla de tarifas del ISR proporcionada por el SAT.
- Calcular el ISR: Aplicar la tarifa correspondiente a cada tramo de ingresos y sumar los resultados.
- Presentar la declaración anual: El jugador debe presentar la declaración anual del ISR al SAT antes de la fecha límite establecida.
Teniendo en cuenta esta información, un ejemplo concreto sería que si un jugador gana $10,000 pesos al mes, su ingreso anual sería de $120,000 pesos. Aplicando las tarifas del ISR estipuladas en el 2024, el impuesto a pagar sería de aproximadamente $9,829 pesos al año. Por otra parte, todos los futbolistas mexicanos están obligados a presentar su declaración anual del ISR al SAT si sus ingresos anuales superan el límite establecido para la obligación de declarar, que en 2024 fue de $400,000 pesos.
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¿Cuánto gana un futbolista profesional en México?
Según un artículo publicado en Infobae, los futbolistas superan con creces el promedio de ingresos en México. Comenzando por las fuerzas básicas, los ingresos mensuales de los jugadores jóvenes oscilan entre los $20.000 y $50.000 pesos mexicanos.
Si bien es cierto que la Liga MX presentó recortes salariales luego de la pandemia por el Covid-19, los futbolistas de Primera División reciben en promedio hasta 3,8 millones de pesos mensuales, es decir, los jugadores del torneo mexicano pueden llegar a ganar alrededor de 280 mil pesos por partido en promedio.
No obstante, cabe aclarar que todo dependerá del club para el que jueguen y que el contrato de cada uno de ellos es completamente diferente.
