La postal que dejó el Real Betis vs Real Madrid

El Benito Villamarín vivió la quinta edición de la tradicional lluvia de peluches, un evento que se ha convertido en una tradición previa a las festividades navideñas

Luis Salazar
Internacional
Betis
Azteca Deportes

la quinta edición de la tradicional lluvia de peluches se llevó a cabo este sábado 9 de diciembre en el Benito Villamarín durante el partido entre el Betis y el Real Madrid, programado para las 16:15.

Este evento solidario busca recolectar peluches donados que serán destinados a niños de bajos recursos. La acción se llevó a cabo durante el descanso del partido, y se invita a los aficionados a lanzar los peluches después de una cuenta atrás que se realizará en el intermedio del juego.

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Una acción solidaria

El club especifica que, con el fin de llevar a cabo la lluvia de peluches de manera coordinada y segura, los aficionados deben seguir algunas directrices. Los peluches deben tener dimensiones que no excedan los 30 centímetros ni pesar más de 200 gramos. También se prohíbe que tengan baterías, internas o externas, que puedan causar daño al ser lanzados, así como elementos duros que puedan tener efectos similares.

No obstante, si algún aficionado desea llevar un juguete de mayor tamaño o con baterías, el personal de seguridad en las puertas se encargará de recogerlos para añadirlos a la recolección.

Adicionalmente, el Betis hace un llamado a los aficionados para que respeten la cuenta atrás antes de lanzar los peluches, con el objetivo de llevar a cabo la lluvia de manera coordinada y lograr un mejor resultado.

Antes del encuentro, el club emitió un comunicado para explicar las medidas a llevar a cabo para el lanzamiento de estos juguetes.


“Para que la lluvia de peluches se realice de manera coordinada y segura, el Real Betis Balompié pide a sus aficionados que observen una serie de directrices. Los peluches no podrán superar los 30 centímetros en ninguna de sus dimensiones y los 200 gramos de peso, ni tener baterías, tanto internas como externas, que puedan causar daño al ser lanzados. Del mismo modo, no deberán tener elementos duros que pudiesen causar similares efectos. Aun así, si algún aficionado quisiera traer un juguete de mayor dimensión o con baterías, el personal de seguridad situado en las puertas recogerá los juguetes para sumarlos a la recogida”.

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