Mientras un equipo se alza como uno de los grandes favoritos a acceder y llevarse el Super Bowl, otro, que en principio era un candidato muy potente para ganar, poco a poco se va desinflando.
Los Bills de Buffalo vencieron a domicilio, en el Arrowhead Stadium, a los Kansas City Chiefs, con un Patrick Mahomes desesperado y desconcertado, que lanzó dos intercepciones y ligó su cuarto partido consecutivo dando el ovoide al rival.
Buffalo no temió meterse a la casa de uno de los equipos más fuertes de la NFL, para derrotar con contundencia 38-20 al equipo que dirige Andy Reid.
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De nuevo el mariscal de campo Josh Allen fue fundamental. En apenas 15 pases completados consiguió 315 yardas y tres pases de anotación, dos de ellos a Emmanuel Sandres. Además, Allen anotó una vez más por la vía terrestre.
La revancha de la AFC
El mariscal de campo Josh Allen lanzó tres pases de touchdown y corrió por otro, dirigiendo a los Bills de Buffalo a una victoria como visitante por 20-38 contra los Chiefs de Kansas City.
Los Bills consiguieron la victoria en un partido de revancha por el título de la Conferfencia Americana (AFC), que tuvo una demora de más de una hora por la descarga eléctrica de un rayo.
Allen terminó con 315 yardas por aire, y Micah Hyde devolvió una rara interceptación del mariscal de campo Patrick Mahomes 26 yardas para otra anotación.
Mientras que los Bills (4-1) vencieron a los Chiefs (2-3), que siguen propensos a pérdidas de balón por segunda vez en sus últimas siete reuniones.
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El mariscal de campo de los Chiefs, Mahomes terminó con 272 yardas aéreas y dos touchdowns con dos interceptaciones y un balón perdido.
El ala cerrada Dawson Knox fue muy importante en el ataque por aire, logrando 117 yardas en apenas tres atrapadas.
