¡El rostro de la 4T! Fobaproa ocultó 7 mil mdd, pero sexenio anterior tiró más de 60 mil mdd a la basura
Mientras el gobierno sigue mirando al pasado en busca de chivos expiatorios, no se avizora un sentido de responsabilidad real hacia el pueblo mexicano.
Recientemente, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) dio a conocer que en la llamada “panza” del FOBAPROA había ocultos aproximadamente 7 mil millones de dólares en deudas privadas.
Esta cifra resulta impactante y evidencia graves problemas financieros relacionados con la gestión pasada de los recursos públicos. Sin embargo, y aunque esta cantidad resulte considerable, no es nada si se compara con el despilfarro de dinero público que se vivió durante el último sexenio, visible y documentado a la vista de todos.
El costo real de los proyectos faraónicos del sexenio pasado
Para dimensionar el tamaño del dispendio, basta con revisar algunos de los principales proyectos del gobierno anterior y sus costos asociados:
- Cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco: 16,599 millones de dólares.
- Construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA): 3,750 millones de dólares.
Total solo en el nuevo aeropuerto y la cancelación del NAIM: 20,349 millones de dólares.
Además, la construcción del Tren Maya, otra obra emblemática pero polémica, se llevó otros 25,300 millones de dólares. Según el académico de la Universidad Panamericana, Gabriel Pérez del Peral, con este presupuesto se pudieron financiar 10 universidades como la UNAM, 24 institutos como el Politécnico Nacional, o construir 33 hospitales generales regionales.
La Refinería Olmeca, otro gigantesco agujero financiero
No podemos olvidar la Refinería Olmeca, también conocida como Dos Bocas, que ha costado alrededor de 20 mil millones de dólares y que, además, no opera con la eficiencia esperada -recientemente sufrió fallas técnicas importantes-. Sus costos y problemas reflejan otra transferencia masiva de recursos públicos sin resultados claros.
La analista en temas energéticos Susana Cazorla señala que estos gastos representan pérdidas y transferencias directas de impuestos de los mexicanos sin beneficios tangibles como son la educación, salud o infraestructura social. En total, estos tres grandes proyectos suman más de 65 mil millones de dólares.
“Ahorita ha sido pura pérdida, pura transferencia más de nuestros impuestos (...) ¿tú sabes cuánto es eso? Te alcanza para cuantos años de presupuesto para educación, salud”, indicó.