WASHINGTON.- Una medición de la actividad manufacturera estadounidense subió en junio, probablemente porque los aranceles al acero y al aluminio importados provocaron interrupciones en la cadena de suministros que hicieron que las fábricas tardaran más en entregar sus productos.
El Instituto de Gerencia y Abastecimiento (ISM por sus iniciales en inglés) informó el lunes que su índice de actividad fabril nacional trepó a 60,2 en junio desde 58,7 en mayo. Una medición superior a 50 indica expansión del sector, que representa casi un 12 por ciento de la economía estadounidense.
“La demanda sigue sólida, pero los recursos laborales y las cadenas de suministros siguen con problemas”, dijo Timothy Fiore, jefe del comité de sondeo a empresas manufactureras del ISM.
“Los consultados están sumamente preocupados por cómo la actividad relacionada con aranceles afecta y seguirá afectando a sus negocios”, agregó.
Estados Unidos está en medio de una disputa arancelaria con sus principales socios comerciales. Analistas temen que los aranceles puedan cortar las cadenas de suministros, reducir la inversión empresarial y borrar los efectos positivos de una rebaja impositiva.
Para justificar los aranceles, el presidente Donald Trump argumenta que Estados Unidos está poniendo freno a desequilibrios de los que se han aprovechado sus socios comerciales.
El subíndice de entregas de proveedores del ISM subió 6,2 puntos a 68,2 en junio. La ampliación de los tiempos de entrega de los proveedores normalmente se asocia con una mayor actividad, lo que contribuye de manera positiva al índice ISM.